Notas de blog:
La Milla de la Cerveza es un ejemplo de cómo el deporte puede adaptarse para atraer a nuevos participantes mediante formatos no convencionales. Aunque el consumo de alcohol plantea cuestionamientos, su énfasis en la diversión, la inclusión y la actividad física la convierte en una herramienta efectiva para promover el deporte en contextos sociales. Eventos como este demuestran que la promoción deportiva no siempre debe ser solemne, sino que puede ser una celebración de la creatividad y el movimiento, siempre que se maneje con responsabilidad.

La Milla de la Cerveza, o Beer Mile, es una competencia atlética singular que combina correr con el consumo de cerveza. En esta prueba, los participantes deben completar una milla (1.609 metros, equivalentes a cuatro vueltas en una pista de atletismo estándar) mientras beben una lata o botella de cerveza de al menos 330 ml y 5% de alcohol antes de cada vuelta.
Las reglas son estrictas: la cerveza debe consumirse en una zona de transición de 10 metros antes de la línea de salida/meta, y vomitar durante la carrera conlleva una penalización de una vuelta extra.
La prueba, que ha ganado popularidad en países como Estados Unidos, Canadá y algunos lugares de Europa, tiene récords mundiales impresionantes, como el de Corey Bellemore (4:33 en hombres) y Erin O’Mara (6:08 en mujeres).
Orígenes y popularidad
La Milla de la Cerveza tiene sus raíces en los años 80 en círculos universitarios de Norteamérica, particularmente en Ontario, Canadá, donde se formalizó un reglamento en 1990 gracias a figuras como John Markell. Lo que comenzó como una actividad recreativa entre amigos ha evolucionado hasta contar con eventos organizados, como el Beer Mile World Classic, y una plataforma oficial (beermile.com) que registra marcas y clasificaciones. Su atractivo radica en su carácter festivo, que combina el desafío físico con un ambiente social y desenfadado, atrayendo tanto a corredores aficionados como a atletas profesionales, como el subcampeón mundial de 800 metros Nick Symmonds.
¿Por qué se considera parte de la promoción del deporte?
A primera vista, combinar alcohol con actividad física puede parecer contradictorio, ya que el consumo de cerveza durante una carrera puede causar deshidratación, afectar el rendimiento y ralentizar la recuperación muscular, según estudios citados por sitios como Science For Sport. Sin embargo, la Milla de la Cerveza se alinea con la promoción del deporte por varias razones:
- Fomento de la actividad física en un formato accesible: La carrera no requiere experiencia previa en atletismo, lo que la hace atractiva para un público amplio. Eventos como la Milla de la Cerveza en Cadrete, España, o en Badilla, Zamora, están diseñados para ser inclusivos, incentivando a personas que no suelen participar en carreras tradicionales a practicar ejercicio.
- Promoción de la interacción social y el ocio activo: La prueba fomenta la camaradería y el compañerismo, valores asociados al deporte. Organizadores como el Club Running Cadrete o Charla Deportiva destacan que el evento busca crear experiencias memorables y promover hábitos saludables en un contexto lúdico, siempre enfatizando el consumo responsable.
- Atracción de nuevos públicos al atletismo: En un momento en que las competiciones tradicionales de atletismo enfrentan desafíos para captar audiencias, la Milla de la Cerveza ofrece una alternativa fresca y viral. Su cobertura mediática, con millones de vistas en plataformas como YouTube, y su presencia en redes sociales han revitalizado el interés por las carreras pedestres, especialmente entre generaciones jóvenes.
- Enfoque en la diversión y la creatividad: A diferencia de las competiciones de élite, la Milla de la Cerveza no se toma demasiado en serio, lo que reduce la presión sobre los participantes y promueve el deporte como una actividad placentera. Variaciones como la Vertical Beer Mile en trail running o versiones con distancias mayores demuestran su capacidad para innovar y mantener el interés.
La controversia del alcohol
La inclusión de cerveza en una actividad deportiva genera críticas. Algunos, como se refleja en comentarios de lectores en MARCA.com, consideran que «trivializa el atletismo y promueve conductas poco saludables.» Desde un punto de vista científico, el alcohol puede afectar negativamente la regeneración muscular y la hidratación, lo que choca con los principios de la preparación atlética. Sin embargo, los organizadores contrarrestan estas críticas promoviendo el consumo moderado (cuatro cervezas en total, en un contexto controlado) y destacando que el evento no busca reemplazar competiciones serias, sino complementarlas con un enfoque recreativo.
Consideraciones finales:
Hoy en día los problemas que aquejan a nuestras naciones, son mucho mayores que enmarcar una competencia social en los términos acá expresados, en otras palabras. Existen problemas sociales con una profundidad mayor que lo que estamos tratando de llevar al debate es el abordaje de los mismos desde otras ópticas: Salud, deporte por mencionar algunos antes que la seguridad como se ha querido abordar el problema de la violencia (por decir un ejemplo)
Vamos adelante que hay mucho por hacer!